sábado, 18 de agosto de 2012

De pronto, él y yo éramos los de siempre, separados del resto del mundo, sin tiempo ni espacio; él y yo flotando en el espacio sideral, hablando un lenguaje que sólo nosotros conocíamos; inmunes a cualquier terremoto, cataclismo u otra desgracia natural que se produjera a nuestro alrededor. Sólo mirar su dulce sonrisa, me provocaba cosquillas en el corazón, que latía más y más deprisa, y su voz me acariciaba los sentidos.
Nos reíamos, y seguíamos riéndonos así. Hablando sin saber muy bien de qué ni por qué.
Quería disfrutar al máximo de esos momentos mágicos, de ese trocito de cielo azul que se asomaba por la ventana, de los rayos de sol que caían sobre mi cama, del olor del verano, de las risas con los amigos...
Suena el despertador; todo era un sueño, uno de esos sueños de los que no quieres despertar, pero, por desgracia, siempre acabas despertando.
Ahora tendré que conformarme con llenar hojas y hojas con tu nombre; mirarte disimuladamente cuando te acercas a mí y desviar la mirada cuando se me cruza con la tuya.
No sé si te das cuenta, pero tu voz hace que mi corazón lata a más de mil pulsaciones por minuto.
Siempre pensé que la vida se vivía a base de ilusiones, pero hacerse demasiadas ilusiones, no siempre es bueno.
Vivo para esperar el día en el que por fin puedas verme con los mismos ojos con los que te veo yo a tí; con los mimos ojos con los que me miras en mis fantasías.

domingo, 17 de junio de 2012

Sólo date cuenta, de que siempre estará ahí. En el momento en el que tu risa sea tan fuerte, que hasta tú te des cuenta de lo escandalosa que es, estará ahí. En el momento en que tu enorme corazón se vaya encogiendo cada vez más y más, estará ahí. En el momento en el que esas preciosas lágrimas comiencen a resbalar por esa cara tan reluciente, estará ahí. Recuerda que no hay caballeros andantes, ni jinetes, ni luchadores de guerra, ni armas, ni inventos que puedan derrotar al amor, jamás se irá.

martes, 5 de junio de 2012

Ese uno por ciento de las personas verdaderamente felices.

Llegados a estas alturas, me he dado cuenta de que el mundo está dividido en dos partes; por un lado, todas aquellas personas que quieren ser felices y les es prácticamente imposible serlo, y por otro lado, esas personas que podrían ser felices perfectamente y no se molestan ni en intentarlo.

lunes, 28 de mayo de 2012

-Te quiero...
-¿Cómo?
- ¡Que estoy harta! Que mis lágrimas no aguantan sin salir de mis ojos cada vez que te veo tontear con otra chica. Que cuando pasas por mi lado algo me dice que tengo que girar la cabeza, para que no te des cuenta de que te estoy mirando con cara de atontada. Que he perdido la cuenta de las veces que he intentado llamar tu atención y tú no me has hecho ni caso. Siento que soy invisible y si no fuera porque es imposible, me lo creería de verdad. Hay veces que me gustaría gritar tu nombre en alto para que todo el mundo se de cuenta de que te necesito en mi vida, te necesito conmigo, a mi lado, TODOS LOS DÍAS.
¿Te ha quedado ya bastante claro?

domingo, 27 de mayo de 2012

Que nunca es demasiado tarde para sonreír.

Ahora me levanto, miro al frente y empiezo a pensar. ¿Cómo es posible que haya aguantado tanto tiempo y cómo he podido tardar tanto en darme cuenta de todo esto?
No es fácil ser feliz, es muy complicado, pero jamás sería imposible. Todos y cada uno de nosotros tenemos derecho a serlo y tenemos derecho a que nos respeten en cada uno de nuestros pequeños errores, pero yo jamás fui testigo de ello.
Llevo toda mi vida pensando que realmente tal y como vivía era lo normal; el sufrimiento era rutina, el dolor formaba el camino de la vida y las lágrimas formaban un mar, en el que me bañaba diariamente.
Ahora estoy aquí, para avisar a todos los que piensen que sufrir es rutina, ya que nunca es demasiado tarde; todos los que piensen que cuando el dolor llama  tu puerta, ya no hay salida de emergencia. Por favor, que nadie cometa el mismo error que cometí yo. Hay que pararse a pensar y darse cuenta de que, si quieres ser feliz, hay que intentarlo, sonreír, luchar, amar hasta el punto en el que te duela el corazón; que si hay que sufrir, que sea de amor, de añoranza, de cariño. Nadie, repito, NADIE puede decir que sólo sufre, que no vive, porque si es así, es sólo porque no ha intentado vivir como todos debemos hacerlo. Y todo aquel que no valore su vida y que quiera destrozarla cometiendo un error y despidiéndose de ella, sólo se puede denominar cobarde, por no hacer frente a todo aquello que provoque tu estado de ánimo, tu 'No soy feliz'.
Primero llora, luego sonríe, vuelve a llorar y sonríe aún más fuerte que antes. Esto es la vida de verdad.



lunes, 21 de mayo de 2012

Serán las coincidencias de la vida.


Hoy me pasó algo realmente extraño; pasaste tú por mi lado y mi corazón empezó a darme golpes como si quisiera avisarme de algo extremadamente importante.

domingo, 20 de mayo de 2012

Ese momento en el que ves a esa persona y se te para el corazón; cuando no eres capaz de pronunciar su nombre sin que tus mejillas empiecen a parpadear; cuando, en medio de una película, por cada beso, cada abrazo, cada mirada, cada frase, tú y esa persona sois los protagonistas; cuando cada noche, te paras a pensar, te acuerdas de sus ojos, de su última mirada acompañada de esa sonrisa tan preciosa y única para ti, le intentas buscar los defectos y no los encuentras y si los encuentras, admites que te encantan, porque para ti esa persona es perfecta; una lágrima de desesperación por no poder estar junto a esa persona baja por tu mejilla, suspiras, coges aire y vuelves a suspirar, te secas las lágrimas, cierras los ojos y empiezas a decir para ti: 'Por favor, quiero soñar una noche más con esa persona'. En tus sueños, te acaricia, te mima, te besa,  os pertenecéis el uno al otro. Cuando te despiertas en la parte más bonita del sueño, te muerdes los labios, aprietas los ojos, sólo para intentar volver a esa misma parte del sueño. Serías capaz de dormir toda tu vida, sólo por estar eternamente con esa persona. Justo en ese momento, es cuando realmente conoces el amor infinito.