domingo, 17 de junio de 2012

Sólo date cuenta, de que siempre estará ahí. En el momento en el que tu risa sea tan fuerte, que hasta tú te des cuenta de lo escandalosa que es, estará ahí. En el momento en que tu enorme corazón se vaya encogiendo cada vez más y más, estará ahí. En el momento en el que esas preciosas lágrimas comiencen a resbalar por esa cara tan reluciente, estará ahí. Recuerda que no hay caballeros andantes, ni jinetes, ni luchadores de guerra, ni armas, ni inventos que puedan derrotar al amor, jamás se irá.

No hay comentarios:

Publicar un comentario